domingo, 4 de octubre de 2015

NOCUENTO PARA PICAR HUESOS NOTA DE SUICIDIO CON TIERNA DESPEDIDA Juan Josè Bocaranda E






NOCUENTO PARA PICAR HUESOS
NOTA DE SUICIDIO CON TIERNA DESPEDIDA

Juan Josè Bocaranda E

La escogiò entre muchas y se casò con ella. Y la convirtió en “tronco de picar huesos”,  de èsos que usan en las carnicerìas de campo. Todo, a cuenta de que sus padres lo habían maltratado y dejado en el abandono treinta años atrás.
La inauguración de las golpizas tuvo lugar  la noche de la miel amarga, cuando la violò y dejò casi muerta.
Para salvarla y no tener el trabajo de buscarse otra tonta, la llevò al hospital.
Las palizas fueron arepa de cada dìa, hasta que una tarde la encontró muerta. Se había suicidado, después de oscilar entre los sangrientos maltratos del marido y la indolencia estúpida de los policìas (a los que ella llamaba soburros).

En el suelo, al lado de la cama, hallò una nota: “busca en el escaparate un puchingboll gigante. Te lo dejo para que lo golpees hasta que le saques la chicha, pues tanto èl como yo somos culpables de la mala vida que te dieron tus padres. Adios para siempre, maricòn”.